Para poder darle forma a la idea general del encabezado, lo primero a definir es conocer claramente que es un socorristas o rescatista. Para mí, será la persona que llegará a asistirá una víctima ante un incidente imprevisto y que evidentemente necesita asistencia. Muchas veces esta oportuna intervención se traduce en un asunto de vida o de muerte.
O sea, para mí un rescatista no pertenece únicamente a la Cruz Roja, también hay que considerar a los bomberos, los policías (de todos los tipos), agentes judiciales de investigación, guías scouts y un largo etcétera. Ser rescatista es mas un vocación que figurar ante una institución que tenga el rescate un fin en sí mismo.
Bien, cual ha sido el llamado perfil del socorrista, o en palabras de administradores que no son rescatistas, ¿cuáles son los requisitos para llegar a ser rescatista? ¿Qué debe de buscar la institución del rescatista? o será mas bien, ¿que debe de buscar el rescatista en la institución?
Algunos han dicho mucho sobre esto, en esto me incluyo: Hemos pensado que entre mas preparado académicamente mejor, a lo que debo de agregar que esto no es completamente cierto, ya que la vocación no es partidaria de militar por aulas y posarse en títulos. Considero que la educación es importante, pero no debe ser el determinante definitivo. Otros señalan la disposición del tiempo, que entre más tiempo invierta - yo le diría tiempo libre - mejor. Pero esto es de cuidado. Que no pase como en muchos Bases de Servicio de Emergencias Prehospitalarias que terminan siendo aparto hoteles, y tras de que hay que hospedarlos, tenemos que soportar todas las insolencias y las malas caras que puedan llevar estas personas llenas de tensión que no pueden o no quieren regresar a sus respectivas casas.
En fin ¿cual es el perfil del socorrista - rescatista?
Respondo esto diciendo que es una persona. Si una persona con familia, un trabajo, compromisos adquiridos antes, durante y después de su formación como rescatista. Es una persona que tiene que balancear los tiempos entre su familia y su vocación. Porque será esta vocación la que me dicte que clase de rescatista tendré. Uno que no le importe mojarse los pies estando en servicio activo o tendrá que buscar a alguien que se moje los pies por él.
Mucho ojo jefes de sección, administradores de personal, líderes de grupos. No perdamos de vista que por mas rescatistas (hombres o mujeres duros de cuerpo y de mente) seguimos hablando de personas. Estas profesiones no están hechas para todas las personas. Nunca entenderán el porque sacrificar horas de sueño, soportar lluvias torrenciales, y el jamás recibir una nota de aliento o agradecimiento. Ser rescatista es querer ayudar y tomarse el tiempo para aprender a hacerlo.
Que sigue en este perfil: Capacitación y no ocurrencias. Como es posible que muchas personas con vocaciones inexploradas tengan que soportar procesos de selección inútiles que solo arruinan cualquier posibilidad de fermentación. La capacitación debe de ser estructurada, EVALUADA y sobretodo, continua. Sin esto no es posible mantener los niveles de calidad que al menos, yo busco día a día.
Que más: ¿ Planes funcionales? Lagunas jurídicas rellenas de soluciones tangibles. Adecuados equipos para trabajar. Que los administradores y los que tienen los poderes de decisión puedan entender el porque del equipo. Es difícil entender porque usar tantos apósitos en una herida que sangra, o porque un policía debe de cambiar su munición cada cierto tiempo, aunque nunca haya detonado su arma. Y esto me lleva a otro punto:
La Práctica. Esta debe de ser supervisada y por supuesto evaluada a cada paso. No es posible que existan personas que simplemente busquen portar un uniforme y salir a atender cualquier caso sin tener la menor idea de lo que ocurre o como proceder.
El rescatista debe:
- Ser consciente de sus otras oblaciones (académicas, laborales, familiares, religiosas)
- Ser consciente que es ser humano y persona.
- Tener esta vocación de servicio a los demás (solo uno sabe porque quiere exponer la vida de
esta forma)
-Facilidad de adaptarse a situaciones nuevas.
- Capacidad de estudio (sistemático y continuado)
- Entender que se trabaja en equipo o cómo mínimo en parejas. (héroes solo en guerras)
- Conocer la institución que le permite dar rienda suelta a su vocación.
- Que pueda combatir la rutina. (hacer las mismas cosas no siempre es lo correcto)
Finalizo diciendo que ser un rescatista es un privilegio, no un título y quiero saludar hoy a todos aquellos hombre y mujeres que entienden esto y que salen todos los días de su casa para hacer que otros se despreocupen y sigan con su vida.
Saludo a todos ellos. espero poder seguir este ejemplo y plantar semillas que cosecharé en el futuro.
Juan Gabriel Hidalgo Hernández
